Siempre hemos pensado que tenemos que aprender para llegar a ser alguien.
Creemos que necesitamos el control.
Creemos que necesitamos depender de alguien, ¿de su reconocimiento quizá? ¿de su amor?
Pero la realidad es que si sueltas el control, si dejas de hacer, si paras a observarte, te das cuenta de que todo esta ya dentro de ti. Parece una frase hecha pero hay que sentirlo y para hacerlo no sirve solo con leerlo, tienes que parar.
Cierra los ojos,
déjate llevar por tu movimiento,
conecta con tus recuerdos,
sigue tu intuición,
escucha tu cuerpo,
empieza tu viaje…